El Cinca ayuda en el 34 descenso.
El Cinca lleva en volandas a los nabateros del Sobrarbe
El fuerte caudal de este año favorece un descenso rápido de las tres navatas que han recorrido los 11 kilómetros entre Laspuña y Aínsa rememorando el viejo oficio de los nabateros.
Texto de María José Villanueva Huesca (Heraldo de Aragón)
En la época del deshielo, las navatas surcaban los ríos del Pirineo para transportar la madera de los bosques de montaña hasta Tortosa, en la desembocadura del Ebro. La vieja tradición se ha rememorado este domingo en la comarca de Sobrarbe. El descenso de tres embarcaciones, con seis tripulantes en cada una de ellas, ha sido rápido y sin incidencias. El río bajaba con un abundante caudal, lo que ha permitido que en una hora y cuarto, aproximadamente, realizaran el recorrido entre Laspuña y Aínsa.
La destreza de los navegantes ha permitido aprovechar el fuerte caudal para mostrar al público un viaje "muy vistoso", en palabras de Dani Castillón, miembro de la asociación y que ha sido una de las 18 personas que se ha subido a las tres balsa de troncos. Lo mejor, asegura, el acompañamiento del público. "Hay gente en cualquier rincón, que antes no se veía".
Si algo destaca Castillón es la pericia de los jóvenes, que pese a llevar pocos años participando en la exhibición han aprendido pronto de veteranos como Paco Sierra, Carlos Serrano o Daniel Pallaruelo, quienes conocen en profundidad los secretos del río y de la madera. "Es la combinación perfecta entre veteranía y juventud", asegura. El relevo generacional está, pues, garantizado.
El río también ayuda. El público tiene fácil acceso para a lo largo del recorrido contemplar el descenso de las embarcaciones. "Hay sitios amplios y buenos saltos", comenta Castillón.
Ya es la 34 edición del descenso por el Cinca. El programa arrancó ya el viernes con la construcción de las nabatas, un homenaje en el monolito dedicado a los antiguos nabateros y la proyección del documental 'Maderadas'. El sábado siguió la construcción y el aguado de las barcas y una cena de confraternización. El descenso ha arrancado este domingo a las 11.00 desde el puente de Laspuña para finalizar en el de Aínsa, donde el Cinca y el Ara se abrazan para aportar sus caudales al embalse de Mediano.
